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La Quebrada de los Cuervos en el departamento de Treinta y Tres es uno de esos destinos clásicos del
circuito de turismo “natural" en nuestro pais, el lugar es realmente impresionante,
se trata obviamente de una quebrada, muy profunda y con tupido monte en su laderas sobre las cuales se ha trazado un sendero
que en los tramos mas difciles presenta pasamanos y cuerdas para facilitar el descenso en el primer tramo y el ascenso en
el segundo.
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Bajando por la quebrada. |
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Uno de los tramos mas "soft" del camino. |
sea de observación de aves o de turismo llamémosle natural (nunca me convenció
el adjetivo ecologico aplicado al turismo) . En realidad la Quebrada de los Cuervos es una mas de una cantidad de quebradas que hay en toda
el area, nosotros paramos en una estancia de la zona con campos donde también habia quebradas que si bien no eran tan profundas
como la de los Cuervos tenian en sus laderas montes aun mas impenetrables, pasamos todo el sábado y la mañana del domingo
recorriendo estas quebradas, subiendo cerros y cruzando puentes colgantes sobre arroyos y
cañadas (que en esta zona tienen mucha corriente debido a lo escarpado del terreno ) todo en medio de un paisaje
increíble, pero al igual que en la
Quebrada de los Cuervos fueron muy pocas las aves que pudimos
observar, probablemente habría que visitar la zona en primavera cuando la
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Desde el punto de vista de la observación de aves el nombre
del lugar no podría ser mas apropiado porque los cuervos se ven desde quilómetros antes de llegar a la quebrada , llegando
a la quebrada ,sobre la quebrada, en la quebrada , en fin, no hay mejor nombre
para el lugar, lamentablemente la cantidad de cuervos no se tradujo en cantidad de otras especies de aves porque fue muy poco lo que pudimos ver, debo aclarar que la epoca del año no era la mejor (mayo) ni la hora
(14:00) ademas de que el grupo con que íbamos no era de observadores de aves y que el camino es lo bastante exigente como
para estar atento a las aves que puedan aparecer, de todas formas el entorno hacen de este lugar un “imperdible” entre las salidas ya
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Otra de las quebradas de la zona. |
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Se aprecia el tupido monte que crece en las laderas. |
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actividad de las aves es mucho mayor, pero el cansancio de las caminatas por tan intrincados pasajes sumado
a la decepción por no haber observado gran cosa se disipo rápidamente por la
noche con un cordero a la brasas carneado aquella misma mañana y degustado frente a la estufa a leña de la cómoda cabaña de
piedra donde pernoctamos.
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